Contratapa: Cristina Milich Grimaut:

"La Córdoba de antes, escenario imprescindible de fantasmas que acompañaban la vida cotidiana de nuestros antiguos, siempre de la mano conocedora de Grimaut! ... Quizás para acortar las largas noches de invierno, el ingenio de los vecinos daba cuenta fehaciente de la existencia de seres de toda laya, perros con lenguas de fuego, faroles intimidantes, degollados en pena y el desgarrador grito de la Pelada, todos deambulando por los adoquines añosos de las iglesias y de las callecitas perdidas... Con el sol, todo parecía iluminarse ya que el tiple agudo de los pájaros acompañaba a niños en su viaje a las escuelitas bajo los talas; las que no eran pocas ya que, con título de maestra o sin él, muchas cordobesas recibían a los alumnos en sus casas.Aquí en "Oratorios y barriadas", lugares y viejas sabias vuelven a la vida para una vez más emocionar a memoriosos e ilustrar a los que vienen sobre hechos y decires que también explican la Córdoba de hoy."

 

Contenido:

 

El oratorio del Degolladito

Más de treinta años estuvo en su asiento la vieja terminal de ómnibus

Un barrio que fue

La presunción de un oculto tesoro resucita el recuerdo legendario del Farol de La Cañada

La cuadra de los sustos

La Toma, El Pueblito o Los Indios

Seis barrios de la época de Sobre Monte

Casas municipales

El Triángulo de la Muerte

Nació un árbol criollo, en un patio de la escuela Olmos

¿Qué suerte correrá el tigre de la calle Duarte Quirós?

La que hablaba con las ánimas

Un gran huraco

La Virgen milagrosa

Recuerdos de la ex plaza Vélez Sarsfield

Escuelas

 El Suquía

DE ORATORIOS Y BARRIADAS - Azor Grimaut

$9.000
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Contratapa: Cristina Milich Grimaut:

"La Córdoba de antes, escenario imprescindible de fantasmas que acompañaban la vida cotidiana de nuestros antiguos, siempre de la mano conocedora de Grimaut! ... Quizás para acortar las largas noches de invierno, el ingenio de los vecinos daba cuenta fehaciente de la existencia de seres de toda laya, perros con lenguas de fuego, faroles intimidantes, degollados en pena y el desgarrador grito de la Pelada, todos deambulando por los adoquines añosos de las iglesias y de las callecitas perdidas... Con el sol, todo parecía iluminarse ya que el tiple agudo de los pájaros acompañaba a niños en su viaje a las escuelitas bajo los talas; las que no eran pocas ya que, con título de maestra o sin él, muchas cordobesas recibían a los alumnos en sus casas.Aquí en "Oratorios y barriadas", lugares y viejas sabias vuelven a la vida para una vez más emocionar a memoriosos e ilustrar a los que vienen sobre hechos y decires que también explican la Córdoba de hoy."

 

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El oratorio del Degolladito

Más de treinta años estuvo en su asiento la vieja terminal de ómnibus

Un barrio que fue

La presunción de un oculto tesoro resucita el recuerdo legendario del Farol de La Cañada

La cuadra de los sustos

La Toma, El Pueblito o Los Indios

Seis barrios de la época de Sobre Monte

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El Triángulo de la Muerte

Nació un árbol criollo, en un patio de la escuela Olmos

¿Qué suerte correrá el tigre de la calle Duarte Quirós?

La que hablaba con las ánimas

Un gran huraco

La Virgen milagrosa

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