En la India, aún cuando todos los ríos son sagrados, el Ganges es tenido como el principio que provee todos los comienzos. Ganga Ma lo llaman, madre de todos.
En Rishikesh (foto de tapa), lugar elegido por los buscadores de la verdad para erigir sus ashrams,  el Ganges lleva  el agua de los altísimos glaciares del Himalaya y llega con la fuerza propia al mar de Bengala. Este río sagrado tiene el poder bendito de trasmutar  la energía que generaron a lo largo de sus orillas los santos y los sabios en sus meditaciones durante miles de años. 
De este viaje, que emprendimos en octubre de 2012, quisimos compartir la experiencia de  caminar sobre "la arena de los sabios" y  mojarnos los pies en las prodigiosas aguas del Ganges.  Para finalmente comprobar que el otoño reflejado en las laderas de la otra orilla  era similar al que atesoraba la memoria de la paz y alegría del lugar donde vivimos.